El cuerpo en tanto primer dispositivo de relación con el que conocemos y experimentamos el mundo, es nuestra memoria cultural viva y cambiante con la que nos enfrentamos al adentro y al afuera, a lo público y lo privado, a lo íntimo y lo colectivo, a lo político y lo cultural y, en el caso del presente trabajo de investigación creación, es la pregunta que se plantea desde lugares que nos llevan a considerar de manera amplia las construcciones de sentir, amar y desear, que nos han sido impuestas. El trabajo aquí expuesto es el resultado de un permanente cuestionamiento sobre las formas en las que, a lo largo de la vida, fue construido el cuerpo del artista; en ese sentido Sebastián nos muestra una particular manera de develar todas aquellas instituciones que han incidido de manera homogeneizadora en las formas en que debemos sentir y relacionarnos con los demás; algo así como un desentrañamiento de las doctrinas políticas hegemónicas que han gobernado su subjetividad y que, justamente a través de la creación artística, logra cuestionar o ratificar, haciéndose a un nuevo cuerpo. De este modo, las formas en que el cuerpo es concebido en esta investigación que hoy lleva por nombre CUERPO PRIVADO, nos dejan ver que se trata, en primer lugar, de una mirada crítica a las condiciones heteronormativas impuestas social y culturalmente, revisando sobre todo la realidad de su cuerpo en el contexto de la ciudad de Armenia. Así, durante el recorrido por las piezas que transitan diversos lenguajes artísticos (fotografía, video, cartelismo y performance art) nos encontramos con la que ha sido su forma de asimilar y tramitar esas imposiciones sociales, revisando en detalle cómo su cuerpo ha sido arbitrariamente agenciado al interior de las dinámicas de una familia tradicional católica, pasando por su experiencia en las instituciones educativas, para luego hacer una revisión de la incidencia de estas a nivel social, convirtiéndose este proceso de creación en un importante insumo para entender la multiplicidad de formas que tiene el cuerpo de experimentarse y construirse, reivindicando aquellos cuerpos que se fugan de la norma, revisando lo raro, lo abyecto, lo socialmente no aceptado, para hacer de la construcción de su cuerpo una forma de enunciación política, necesaria para el contexto local en que se gesta el proyecto. En ese sentido, lo que se puede ver a lo largo del recorrido por esta exposición, es una manera particular de abordar lo autoetnográfico como un vehículo emancipatorio en tanto que construye nuevas formas de comprender y abordar la subjetividad, abriendo una posibilidad reflexiva desde el trabajo creativo que trasciende las convenciones predeterminadas para entender el cuerpo, el género, lo masculino. Adrián Hueso Artista visual, docente e investigador.